LO QUE NECESITA SABER: ¿Qué es la infección por el virus del Nilo Occidental? La infección por el virus del Nilo Occidental se transmite por la picadura de los mosquitos. Los seres humanos contraen esta enfermedad cuando los pica un mosquito que es portador del virus. Una madre que tiene la infección puede transmitir el virus al bebé si está embarazada o por medio de la leche materna. ¿Qué aumenta el riesgo de contraer la infección por el virus del Nilo Occidental? Las personas que viajan a sitios donde el virus del Nilo Occidental es común corren un mayor riesgo de contraer esta infección. Es posible que las personas que permanecen o trabajan al aire libre también corran un mayor riesgo de contraer esta infección. Algunos factores pueden hacer que un caso leve de la infección por el virus del Nilo Occidental se convierta en una forma más grave de la enfermedad. Es posible que usted corra un mayor riesgo de tener una forma más grave de la enfermedad si: - Es mayor de 70 años.
- Tiene una afección de larga duración que debilita su sistema inmunológico, como diabetes, cáncer o SIDA.
- Toma medicación que debilita su sistema inmunológico, como esteroides, quimioterapia o medicamentos anti-rechazo.
¿Cuáles son los signos y síntomas de la infección por el virus del Nilo Occidental? Por lo general este virus no hace que la persona se sienta enferma. La mayoría de las personas que contraen esta infección nunca se enteran de que la tienen. Es posible que presente síntomas similares a los de la gripe, como fiebre, dolor de cabeza, dolor de ojos o muscular, cansancio, secreción nasal, tos y dolor de garganta. Puede que pierda el apetito, tenga náuseas, vómitos, dolor abdominal o diarrea. Algunas veces se presenta un salpullido rojo en la piel. Con la forma más grave de la infección por el virus del Nilo Occidental, la persona puede tener fiebre acompañada por uno o más de los siguientes síntomas: - Intenso dolor de cabeza, rigidez o dolor en el cuello
- Confusión o cambios en el comportamiento
- Cansancio extremo o somnolencia
- Convulsiones, temblores o espasmos incontrolables, rigidez o movimiento lento
¿Cómo se diagnostica la infección por el virus del Nilo Occidental? Su médico le pedirá un historial de salud detallado. Le preguntará sobre sus viajes o actividades en el pasado, exposición o contacto con el virus o enfermedades que puede haber tenido. Es posible que deba hacerse uno o más de los siguientes exámenes: - Análisis de sangre: Es posible que analicen una muestra de su sangre para comprobar si tiene la infección por el virus del Nilo Occidental.
- Tomografía computarizada: Este examen también se conoce como escán TAC. Una máquina de rayos x utiliza una computadora para tomar imágenes del cerebro. Es posible que le administren un tinte de contraste antes de tomar las imágenes para que los médicos las puedan ver con más claridad. Dígale al médico si usted alguna vez ha tenido una reacción alérgica al tinte de contraste.
- Imágenes por resonancia magnética (IRM): Para realizar este estudio se utilizan imanes potentes y una computadora que toma imágenes de su cerebro. Las imágenes podrían mostrar si tiene una inflamación en el cerebro. Le podrían administrar un tinte para ayudar a que las imágenes se vean mejor. Diga a los médicos si tiene alergia al iodo o a los mariscos. También podría ser alérgico al tinte. No entre a la sala donde se realiza la resonancia magnética con algo de metal. El metal puede causar lesiones serias. Dígale a sus médicos si usted tiene algún metal dentro o sobre su cuerpo.
- Punción lumbar: Los médicos insertarán una aguja en el conducto raquídeo por la espalda. Los médicos tomarán una muestra de líquido cefalorraquídeo y la enviarán a un laboratorio para analizar si presenta signos de infección.
- EEG: Este examen también recibe el nombre de electroencefalograma. Se colocan varios parches (electrodos) adhesivos en su cabeza. Cada uno de los parches tiene un cable que se conecta a una máquina. Esta máquina imprime un papel indicando las ondas de actividad cerebral procedentes de diferentes partes del cerebro. Los médicos observan estos trazos para ver la forma como su cerebro está funcionando.
¿Cómo se trata la infección por el virus del Nilo Occidental? No existen medicamentos para tratar el virus del Nilo Occidental. El virus desaparece por sí solo. Es posible que deba permanecer en el hospital si presenta signos y síntomas graves de esta infección. Podría necesitar uno o más de los siguientes tratamientos para aliviar sus signos y síntomas: - Soporte respiratorio: Es posible que necesite oxígeno o un respirador para ayudarle a respirar.
- Líquidos por vía intravenosa (IV) Pueden ayudar a evitar o tratar la deshidratación.
- Medicamentos: Es posible que deba tomar medicamento para aliviar el dolor, los dolores de cabeza y la fiebre, o para controlar las convulsiones. Puede que los médicos también le den medicamentos para disminuir la inflamación y la presión dentro de la cabeza. Es posible que le den antibióticos si tiene una infección causada por una bacteria además de la infección por el virus del Nilo Occidental.
¿Cuáles son los riesgos de tener una infección por el virus del Nilo Occidental? Si la infección del virus del Nilo Occidental se propaga al cerebro (encefalitis viral), podría dañarle el cerebro y la médula espinal. Podría tener dificultad para oír, ver, hablar o aprender. Podría provocarle convulsiones o parálisis y podría poner en peligro su vida. ¿Cómo puedo controlar los síntomas? - Tome líquidos según sus indicaciones: Pregunte cuánto líquido debe tomar cada día y cuáles líquidos son los más adecuados para usted.
- Descanse: Descanse cuando usted sienta que es necesario. Empiece a hacer un poco más día a día. Regrese a sus actividades diarias como se le haya indicado.
- Rehabilitación: Es posible que deba hacer fisioterapia, terapia ocupacional o del habla después de recuperarse. Es posible que las terapias le ayuden a adquirir más movimiento, aliviar el dolor, realizar sus actividades diarias y mejorar su capacidad de comer o de hablar.
¿Cómo se puede evitar contraer la infección por el virus del Nilo Occidental? - Evite las picaduras de mosquitos:
- Aplique un repelente de insectos que contenga el ingrediente activo DEET en la ropa y la piel que quede expuesta. Pregunte sobre otros repelentes de insectos para prevenir las picaduras. Use repelentes que contengan un 30% o menos de DEET para los bebés menores de 2 meses. Siga las instrucciones de la etiqueta cuando use un repelente de insectos. No aplique DEET en las manos de niños pequeños ni bebés que puedan frotarse los ojos o ponérselas en la boca.
- No salga al amanecer o atardecer, cuando los mosquitos están más activos. Si duerme al aire libre, use una red para mosquitos.
- Coloque mosquiteros en todas las ventanas y puertas exteriores de su casa. Repare los mosquiteros que estén agujereados.
- Vista camisas de manga larga y pantalones largos para protegerse la piel.
- Controle los lugares donde se crían los mosquitos: Deshágase de los lugares donde el agua puede quedar estancada y se pueden criar mosquitos.
- No deje recipientes donde se puede acumular el agua, como baldes o carretillas en posición vertical y sin tapa.
- Cambie el agua de los comederos de los animales cada pocos días.
- Fíjese en forma regular en los estanques, bebederos para pájaros, comederos de animales, canales de agua y otras áreas donde se almacena el agua.
- Vacíe o drene el agua estancada alrededor de su propiedad, como las canaletas y zanjas que queden tapadas.
¿Dónde puedo obtener más información? - Centers for Disease Control and Prevention (CDC)
1600 Clifton Road
Atlanta , GA 30333
Phone: 1- 800 - 232-4636
Web Address: http://www.cdc.gov/
¿Cuándo debo comunicarme con mi médico? - Usted tiene fiebre.
- Usted tiene comezón, hinchazón o sarpullido en su piel.
- Sus síntomas no mejoran con el tratamiento.
- Usted tiene preguntas o inquietudes acerca de su condición o cuidado.
¿Cuándo debo buscar atención inmediata o llamar al 911? - Sus síntomas empeoran o regresan.
- Comienza a sentirse confundido, actúa de manera diferente que de costumbre o le cuesta más trabajo que de costumbre despertarse.
- Tiene dolor de cabeza muy intenso, rigidez en el cuello o dificultad para pensar con claridad.
- Usted sufre una convulsión.
- Tiene debilidad o no puede mover alguna parte de su cuerpo.
- Tiene dificultad para tragar o hablar, o ve doble.
- Le falta el aire.
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