LO QUE NECESITA SABER: ¿Qué es la ablación por radiofrecuencia para el esófago? La ablación por radiofrecuencia para el esófago es un procedimiento que se hace para extirpar el tejido anormal del esófago. El tejido anormal ocurre cuando el ácido estomacal, debido a la enfermedad por reflujo gastroesofágico, cambia el tejido del esófago. La ablación por radiofrecuencia para el esófago (RFA) reduce el riesgo de desarrollar cáncer de esófago. La RFA puede hacerse también después de la resección de la mucosa del esófago. ¿Cómo me preparo para la ablación por radiofrecuencia para el esófago? Su médico aumentará su medicamento para la enfermedad por reflujo gastroesofágico hasta 1 mes antes del procedimiento. Esto ayudará a sanar cualquier irritación o úlceras en su esófago. No tome medicamentos AINE, antiplaquetarios o anticoagulantes por hasta 7 días antes de su procedimiento. Estos medicamentos causarán más sangrado después de su procedimiento. Pregúntele a su médico cuáles medicamentos debe tomar antes del procedimiento. ¿Qué pasará durante la ablación por radiofrecuencia para el esófago? A usted le darán medicamentos para mantenerlo adormecido, calmado y relajado. Usted no sentirá nada ni recordará el procedimiento. Su médico colocará un endoscopio en su boca y de ahí lo bajará hasta su esófago. Luego le colocará un catéter con un electrodo en el esófago. El electrodo remueve el tejido dañado usando energía por calor. Puede llegar a usarse un catéter con globo si hay una cantidad grande de tejido anormal. Este proceso se repetirá para asegurarse de que el tejido anormal sea extraído por completo. ¿Cuáles son los riesgos de la ablación por radiofrecuencia para el esófago? Puede que usted tenga dolor de pecho y dificultad para tragar después del procedimiento. Usted también puede tener sangrado en el esófago o en el estómago. Los síntomas pueden regresar aún con tratamiento. |