LO QUE NECESITA SABER: ¿Qué necesito saber sobre un drenaje biliar transhepático percutáneo? Un drenaje biliar transhepático percutáneo se realiza para abrir una vía biliar obstruida. ¿Cómo me preparo para un drenaje biliar transhepático percutáneo? Su médico le indicará cómo prepararse para el procedimiento. Es posible que le diga que no coma o tome nada después de la medianoche del día de su procedimiento. Le indicará que medicamentos puede tomar y cuales no puede tomar el día de su procedimiento. ¿Qué sucederá durante el drenaje biliar transhepático percutáneo (PTBD. por su sigla en inglés)? - Antes de su procedimiento a usted le podrían administrar anestesia local, raquídea o general. Al usar anestesia general usted estará dormido durante el procedimiento. Durante su procedimiento se podría necesitar una tomografía computarizada (TC escán) o una fluoroscopia. Su médico insertará una aguja por el lado derecho de su abdomen hasta el interior de su hígado. Por la aguja se introducirá un alambre hasta su hígado.
- Su médico va a usar el alambre para descomponer los cálculos que están obstruyendo su conducto biliar. Su médico colocará una sonda sobre la aguja y retirará la aguja y el alambre. Le dejará la sonda en su lugar. Una pequeña parte de la sonda va a sobresalir de su piel. Si la sonda está tapada, el líquido biliar drenará hacia sus intestinos. Si la sonda está abierta el líquido biliar drenará a una bolsa que está conectada al final de la sonda fuera de su cuerpo.
¿Cuáles son los riesgos de un drenaje biliar transhepático percutáneo? Su vesícula biliar, vía biliar, o vasos sanguíneos podrían sufrir daño. Usted podría sangrar más de lo esperado. Después del procedimiento usted podría presentar inflamación o sangrar alrededor de la sonda. La piel alrededor de la sonda se podría infectar. La sonda puede salirse de lugar o estar bloqueada. Su vesícula biliar se podría inflamar o infectar. En su hígado se podría formar un coágulo de sangre. Usted podría contraer una infección pulmonar. Sus pulmones se podrían llenar de sangre o aire, causándole dificultad para respirar. |