LO QUE NECESITA SABER: ¿Qué necesito saber sobre la ablación por radiofrecuencias del hígado? La ablación por radiofrecuencias es un procedimiento que usa corriente eléctrica para destruir las células cancerosas en el hígado. Un electrodo aguja transmite una corriente eléctrica térmica que destruye el tumor. Este procedimiento generalmente se usa en tumores pequeños. ¿Cómo me preparo para la ablación por radiofrecuencias del hígado? Su médico le explicará cómo debe prepararse para la cirugía. Es posible que le diga que no coma o tome nada después de la medianoche del día de su procedimiento. Le dirán qué medicamentos tomar o no tomar el día de su procedimiento. Es posible que le indique que suspenda la aspirina, analgésico antiinflamatorio no esteroide o anticoagulantes por un tiempo antes de su procedimiento. ¿Qué sucederá durante la ablación por radiofrecuencias del hígado? - Pueden administrarle anestesia general para mantenerlo dormido y libre de dolor durante la cirugía. Es posible que en cambio le administren anestesia local para adormecer el área en la que se realizará el procedimiento. Con la anestesia local, usted todavía podría sentir presión o molestia durante el procedimiento, pero no debería sentir dolor. Su médico puede usar una tomografía computarizada, una resonancia magnética o un ultrasonido para guiar el electrodo aguja hacia el tumor.
- Su médico realizará un corte pequeño en su piel. Es posible que sea necesario que le haga más de 1 corte pequeño o 1 grande. El proveedor introducirá el electrodo aguja o transductor por el orificio. El médico guiará el electrodo aguja hacia el tumor para aplicar calor. Es posible que necesite mover la aguja y administrar calor a las diferentes partes del tumor para asegurarse de destruir todo el tumor. Se retirará la aguja y se aplicará presión en el área para detener el sangrado. El área se cubrirá con vendajes.
¿Cuáles son los riesgos de la ablación del hígado? - Usted podría desarrollar una condición conocida como síndrome de post-ablación. Esta condición causa síntomas similares a los de la gripe que se presentan entre 3 a 5 días después del procedimiento. Estos síntomas incluyen fiebre, náuseas, vómito y dolor muscular que por lo general dura alrededor de 5 días. Usted podría sangrar más de lo esperado o contraer una infección. Podría tener dolor en el abdomen.
- Partes de su hígado podrían sufrir daño debido a la corriente eléctrica durante el procedimiento. Los órganos o tejidos que se encuentran cerca del hígado podrían sufrir daño. Es posible que no todo el tumor sea destruido o que el tumor reaparezca. Se podría presentar un colapso del pulmón (neumotórax). Esto puede poner en peligro su vida.
|