LO QUE NECESITA SABER: ¿Qué es una fractura de pie? Se produce una fractura en el pie cuando uno o más de los huesos del pie se quiebran. Las fracturas de pie por lo general son causadas por traumas, caídas, lesiones por fatiga de una acción repetitiva. ¿Cuáles son los diferentes tipos de fracturas del pie? - Sin desplazamiento: El hueso se agrieta o se quiebra pero permanece en su lugar.
- Desplazamiento: El hueso se quiebra en 2 partes.
- Conminuta: El hueso se quiebra en varios lugares.
- Fractura abierta: El hueso fracturado se sale fuera de la piel.
¿Cuáles son los signos y síntomas de una fractura de pie? - Sensibilidad en el área lesionada
- Dolor en el pie que empeora cuando intenta pararse o caminar
- Adormecimiento en el pie o los dedos del pie
- Se escucha un crujido cuando mueve el pie
- Inflamación, moretones, ampollas o heridas abiertas en la piel del pie lesionado
- Disminución en la capacidad de mover el pie o de caminar
- Cambio en la forma del pie
¿Cómo se diagnostica una fractura en el pie? Su médico le examinará el pie. Es posible que le toque el pie para comprobar si ha perdido la sensación. Además buscará lesiones abiertas en la piel. Podría comprobar si puede mover el pie. Es posible que usted necesite hacerse alguno de los siguientes estudios: - Radiografía: Se trata de una imagen que se toma del pie para comprobar si algún hueso está fracturado. Es posible que deba cargar peso en su pie lesionado para tomar la radiografía.
- Tomografía computarizada: Este examen también se conoce como escán TAC. Una máquina de rayos x utiliza una computadora para tomar imágenes de su pie. Estas imágenes pueden mostrar huesos rotos u otras lesiones al pie. Es posible que le administren un tinte de contraste antes de tomar las imágenes para que los médicos las puedan ver con más claridad. Dígale al médico si usted alguna vez ha tenido una reacción alérgica al tinte de contraste.
- Imágenes por resonancia magnética (IRM): Para realizar este estudio se utilizan imanes potentes y una computadora que toma imágenes de su pie. Las imágenes podrían mostrar si tiene una fractura u otra lesión en el pie. Le podrían administrar un tinte para ayudar a que las imágenes se vean mejor. Dígale al médico si usted alguna vez ha tenido una reacción alérgica al tinte de contraste. No entre a la sala donde se realiza la resonancia magnética con algo de metal. El metal puede causar lesiones serias. Dígale al médico si usted tiene algo de metal por dentro o sobre su cuerpo.
- Escán óseo: Se administra una pequeña y segura cantidad de un medio de contraste radioactivo por vía intravenosa. Se toman imágenes de los huesos del pie para ver si hay alguna fractura.
¿Cómo se trata una fractura del pie? El tratamiento va a depender del tipo de fractura que usted tenga, y su severidad. Es posible que usted necesite alguno de los siguientes: - Bota, yeso o férula: Es posible que le pongan una bota, un yeso o una férula para limitar el movimiento de la parte inferior de la pierna y el pie. Estos dispositivos mantienen los huesos en su lugar, alivian el dolor y evitan que el pie se dañe aún más.
- Medicamento:
- Analgésicos: Es posible que le receten un medicamento para aliviar el dolor. No espere hasta que el dolor sea severo antes de tomar este medicamento.
- Antibióticos: Este medicamento se administra para ayudar a tratar o prevenir una infección causada por bacteria.
- Vacuna antitetánica: Esta vacuna se aplica para prevenir que contraiga el tétano. Es posible que necesite recibirla si se le abrió la piel como resultado de la lesión. Debe darse la vacuna antitetánica si no se la ha dado en los últimos 5 a 10 años.
- Cirugía: Podría necesitar una cirugía si la fractura de su pie es grave o no se cura con otros tratamientos. Si usted tiene una fractura abierta, podría necesitar desbridamiento antes de su cirugía. El desbridamiento es cuando su médico remueve tejido dañado e infectado, y limpia la herida. Se hace para evitar que contraiga una infección y que sane mejor. Es posible que usted necesite alguno de los siguientes:
- Fijación externa: Su médico colocará tornillos en los huesos fracturados a través de la piel. Los tornillos se fijan a un dispositivo que se encuentra fuera del pie. La fijación externa mantiene los huesos unidos, de modo que se puedan sanar.
- Reducción abierta y fijación interna: Durante esta cirugía, su médico le hará una incisión en el pie para enderezar los huesos fracturados. Es posible que use alambres, tornillos y placas de metal o clavos para mantener unidas las partes de los huesos fracturados.
- Fijación con clavo: Es posible que su médico deba usar clavos de alambre de metal para enderezar los huesos fracturados del pie. Los clavos mantendrán unidas las partes del hueso fracturado. Colocarán los clavos a través de la piel y usarán un pequeño taladro para ponerlos en el hueso.
- Tracción: La tracción jala los huesos para colocarlos nuevamente en su lugar. Se podría poner un clavo en el hueso o en el yeso y sujetarlo al dispositivo de tracción. Se cuelgan pesas del dispositivo de tracción para ayudar a poner los huesos en la posición correcta.
¿Cuáles son los riesgos de una fractura del pie? - Los nervios, tejidos y vasos sanguíneos de su pie se podrían dañar durante la cirugía. Podría tener entumecimiento o debilidad en el pie y los dedos del pie. Es posible que su pie no sane bien o que no quede igual que antes de la lesión. Los tornillos o clavos que se usaron durante la cirugía se podrían soltar y podría ser necesario hacer otra cirugía. Usted podría contraer una infección. Se le podría formar un coágulo sanguíneo en la pierna. El coágulo podría desprenderse y viajar a su corazón o cerebro y crear problemas de peligro mortal, como un ataque al corazón o un derrame cerebral.
- Si no recibe tratamiento, puede que la fractura de su pie no se sane. Si la fractura se cura sola, su pie podría quedar deformado. Es posible que no pueda mover el pie tan bien como antes de la lesión. Podría sentir dolor, debilidad o pérdida de la sensación en el pie. Podría correr el riesgo de que se le formen coágulos de sangre. Se le podrían dañar los tejidos y contraer una infección. Si la infección es grave, se le podría infectar el hueso y podría resultar necesario amputarle el pie.
¿Qué puedo hacer para ayudar a que mi pie se cure? - Descanse: Es posible que deba descansar el pie y evitar las actividades que le provocan dolor. Para las fracturas causadas por estrés, usted tendrá que evitar la actividad que causó la fractura hasta que logre sanar.
- Hielo: El hielo ayuda a disminuir la inflamación y el dolor. El hielo también puede contribuir a evitar el daño de los tejidos. Use una bolsa con hielo o ponga hielo triturado en una bolsa de plástico. Envuelva el hielo con una toalla y colóquelo sobre su pie durante 15 a 20 minutos cada hora o como le indiquen.
- Eleve el pie: Levante el pie por encima del nivel de su corazón tan a menudo como pueda. Esto va a disminuir inflamación y el dolor. Apoye su pie sobre almohadas o mantas para mantenerlo elevado cómodamente.
- Fisioterapia: Una vez que haya sanado, un fisioterapeuta podrá enseñarle ejercicios para fortalecer el pie, aumentar el movimiento y aliviar el dolor.
¿Cuándo debo comunicarme con mi médico? - Usted tiene fiebre.
- Le salen nuevas llagas alrededor de la bota, el yeso o la férula.
- Le surge dificultad o tiene mayor dificultad para mover el pie.
- Nota que sale mal olor de debajo del yeso.
- Se le daña la bota, el yeso o la férula.
- Tiene alguna pregunta acerca de su condición o cuidado.
¿Cuándo debo buscar atención inmediata o llamar al 911? - El dolor en su pie lesionado empeora, aún después de descansar y tomar el analgésico para el dolor
- La piel o los dedos del pie se le adormecen, están inflamados, fríos, blancos o azules.
- Usted tiene más dolor o inflamación que antes de que le pusieran el yeso.
- La herida drena líquido o pus.
- La sangre empapa el vendaje.
- Su pierna se siente cálida, sensible y adolorida. Se podría ver inflamado y rojo.
- De repente se siente mareado y sin aire.
- Le duele el pecho cuando respira hondo o tose. Es posible que expectore sangre.
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